Subjetividad de la Época

Subjetividad de la Época
Ernesto Perez

"No hay otro tiempo que el que nos ha tocado"
Serrat
Significantes Amos que nos determinan. Que nos arrastran a una forma de gozar es decir de sufrir.
¿ideologías?: las ideas de la conciencia individual y del imaginario social,
¿los episteme?: conocimientos que los filósofos marcan como el filo de lo discontinuo en un período.
Mentalidades que la historia construye en un momento dado. Aquello que permanece y perdura en un tiempo y que conforman una época, del griego "epéchein": lo que continua, lo que persiste...

Pero " es verdaderamente contemporáneo, aquel que no coincide perfectamente con éste ni se adecua a sus pretensiones y es por ende, en ese sentido, inactual; pero justamente por eso, a partir de ese alejamiento y ese anacronismo, es más capaz que los otros de percibir y aprehender su tiempo”. “Contemporáneo es aquel que mantiene la mirada fija en su tiempo, para percibir no sus luces, sino sus sombras. Todos los tiempos son, para quien experimenta su contemporaneidad, oscuros.” Giogio Agamben

Morir es un arte,
como todo.
Yo lo hago excepcionalmente bien.
Tan bien, que parece un infierno.
Tan bien, que parece de veras.
Supongo que cabría hablar de vocación.
Silvia Plath


lunes, 20 de agosto de 2012

SUJETIVIDAD DE LA EPOCA

                                                      
 Vamos a comentar un fragmento de los Escritos I de Lacan donde se refiere explícitamente a la subjetividad de la época y la relaciona con la labor del psicoanalista. Analizaremos renglón por renglón este párrafo del final de Función y campo de la palabra.

"...la dialéctica no es individual (1)  y la cuestión de la terminación del análisis es la del momento en que la satisfacción del sujeto encuentra cómo realizarse en la satisfacción de cada uno, es decir de todos aquellos con los que se asocia en la realización de una obra humana.(2) Entre todas las que se proponen en el siglo, la obra del psicoanalista es tal vez la más alta porque opera en él como mediadora entre el hombre de la preocupación y el sujeto del saber absoluto. (3)Por eso también exige una larga ascesis subjetiva, (4) y que nunca sea interrumpida, pues el final del análisis didáctico mismo no es separable de la entrada del sujeto en su práctica. (5)

"Mejor pues que renuncie quien no pueda unir a su horizonte la subjetividad de su época. (6)Pues ¿cómo podría hacer de su ser el eje de tantas vidas (7) aquel que no supiese nada de la dialéctica que lo lanza con esas vidas en un movimiento simbólico? (8) Que conozca bien la espira a la que su época lo arrastra en la obra continuada de Babel (9) y que sepa su función de intérprete en la discordia de los lenguajes. (10)Para las tinieblas del mundus alrededor de las cuales se enrolla la torre inmensa, (11) que deje a la visión mística el cuidado de ver elevarse sobre un bosque eterno la serpiente podrida de la vida". (12)
 Jaques Lacan
 (Lectura estructuralista de Freud pág. 138)

Vamos a comentar  estos párrafos del final de  Función y Campo de la Palabra,  llamado también discurso de Roma de 1953, que podemos encontrar en los  Escritos I de Jaques Lacan. Allí en  el  comienzo mismo de su enseñanza nos plantea sus ideas acerca del psicoanálisis, de la formación del analista y como esto esta íntimamente unido con la época. Son párrafos muy importantes porque es la vía para pensar lo social y su importancia en psicoanálisis.
(1)    Utilizando la dialéctica Hegeliana Lacan plantea de entrada que esta no es individual y que implica un vínculo con los otros. Para la terminología que utiliza en ese momento de su enseñanza, es que a través del otro semejante hace su entrada el gran Otro que son las leyes del lenguaje que arrastran el deseo inconciente.
(2)    Plantea el fin del análisis como el fin de un proceso dialectico en una obra humana, con todas las resonancias de producción de algo nuevo. En este sentido podríamos pensar el final como una forma de sublimación pulsional.  En la obra se realiza la satisfacción del sujeto,  es decir en la misma el sujeto lleva su deseo lo más lejos posible en relación al deseo del Otro. (ver http://www.antroposmoderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=1305)
(3)    Aquí plantea que todas las obras humanas tienen la misma dialéctica, la realización del deseo en relación al deseo del Otro, pero la obra del psicoanalista es la mas alta porque opera una mediación entre el hombre de la preocupación y aquí se refiere a Heidegger y su ser para la muerte, y el sujeto del saber absoluto y aquí esta hablando nuevamente de Hegel tomando el punto de llegada de su dialéctica, es decir el sujeto de saber absoluto. Es decir la obra del psicoanalista es llevada por su ser para la muerte alcanzando un saber absoluto, sabemos que ese saber para Lacan es absoluto no como ninguna totalidad sino por saber de la muerte y de la falla esencial de lo humano que el formaliza con S(A) tachado, marcando la castración del Otro.
(4)    Ascesis designaba en el griego clásico los ejercicios metódicos que servían para el entrenamiento físico de los atletas y los soldados. Por analogía, designa en filosofía Ios desprendimientos y los esfuerzos necesarios para adquirir la virtud, para alcanzar la sabiduría. San Pablo  la aplica a la vida cristiana y confiere a la ascesis un sentido religioso, el régimen de vida ordenado a la perfección evangélica, especialmente en el estado de continencia o en la profesión monástica. El diccionario francés de Robert la define así: «Conjunto de ejercicios físicos y morales que tienden a la liberación del espíritu por medio del desprecio del cuerpo». El psicoanálisis de Lacan propone otra ascesis: proceso subjetivo dialectico donde el sujeto encuentra su ser deseante con un sacrificio que es el objeto a. En la operación analítica se corta la relación del sujeto con su objeto y es por esto que hay desidentificación y atravesamiento del fantasma.
(5)    Habla de una ascesis ininterrumpida, un análisis ininterrumpido nunca, no en el sentido de interminable sino que continua con el analizante que llegado al final se transforma en analista. Lacan no diferenciaba entre análisis clínico y didáctico, para el todo análisis era didáctico es decir que el saber del inconciente era la teoría misma. "No hay más que un psicoanálisis, el psicoanálisis didáctico –lo que quiere decir: un psicoanálisis que le ha dado la vuelta a este lazo hasta el final. El lazo tiene que ser recorrido varias veces" (Lacan sem. XI)
(6)    Este párrafo ha merecido muchos comentarios. “Mejor que renuncie el analista que pretenda escuchar lo que se dice en el interior del consultorio sin escuchar, también, lo que viene por la ventana”-decía Lacan- y lo entendemos como el discurso puesto en movimiento en el análisis en el inconsciente de cada sujeto, no es distinto que el discurso social. Por eso en su seminario XVII llama al discurso del inconsciente, discurso del Amo y lo formaliza, siendo el discurso analítico justamente su envés. ¿El horizonte del analista como entenderlo? No creo que como un ideal, más bien como un dedo indicador que señala un punto vacío, el horizonte como línea de falta inalcanzable. Como lugar vacío que enceguece por sus brillos pero deja ver la oscuridad. En este sentido ver el excelente artículo de Giorgio Agamben  “¿Que es ser contemporáneo? http://www.ddooss.org/articulos/textos/Giorgio_Agamben.htm donde el poeta puede traernos algunas semejanzas con el psicoanalista.
(7)    El analista es el que dirige la cura, en este sentido es el eje, el eje de tantas vidas. El eje, el significante de la transferencia que va a guiar su maniobra. El Significante en acto a construir especialmente en aquellos sujetos sin eje, y que tienen su vida a la deriva.
(8)    Para realizar su tarea el analista debe saber lo que guía su accionar, debe saber del orden simbólico y de como la repetición es central. Para el Lacan de esta época el movimiento simbólico dialectico ocurría con la interpretación. Así escribe Intervención sobre la transferencia (Escritos I de 1951 pág. 37) donde analiza el caso Dora en función de distintos momentos de inversiones dialécticas que implican distintos momentos del desarrollo de la verdad inconciente.
(9)    Nuevamente  la historia arrastra al sujeto en un espiral dialectico simbólico donde lo que se repite (en una obra continuada) es Babel, que implica la castración, que implica la división fundamental de lo humano. Babel (En hebreo bl-bl significa balbuceo, confusión al expresarse algo)  “Toda la Tierra tenía una misma lengua y usaba las mismas palabras. Los hombres en su emigración hacia oriente hallaron una llanura en la región de Senaar y se establecieron allí. Y se dijeron unos a otros: «Hagamos ladrillos y cozámoslos al fuego». Se sirvieron de los ladrillos en lugar de piedras y de betún en lugar de argamasa. Luego dijeron: «Edifiquemos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue hasta el cielo. Hagámonos así famosos y no estemos más dispersos sobre la faz de la Tierra”. Más Yahveh descendió para ver la ciudad y la torre que los hombres estaban levantando y dijo: «He aquí que todos forman un solo pueblo y todos hablan una misma lengua, siendo este el principio de sus empresas. Nada les impedirá que lleven a cabo todo lo que se propongan. Pues bien, descendamos y allí mismo confundamos su lenguaje de modo que no se entiendan los unos con los otros». Así, Yahveh los dispersó de allí sobre toda la faz de la Tierra y cesaron en la construcción de la ciudad. Por ello se la llamó Babel,  porque allí confundió Yahveh la lengua de todos los habitantes de la Tierra y los dispersó por toda la superficie”. Génesis 11:1-9. Babel en estos párrafos se va a transformar posteriormente en su enseñanza en cristal de la lengua y luego el “lalengua”.  Es en el “cristal de la lengua”, como llama Lacan en un momento de su enseñanza, al juego significante homofónico, donde se tejen y destejen las operaciones de sentido y sinsentido. Allí donde un mismo saber homofónico puede dar lugar a distintos sentidos, solo por cuestión de escritura. Porque el significante es lo que se lee de lo que se escucha.
(10) La discordia de los lenguajes alude a la discordia de lo humano con su inconciente, pero al mismo tiempo la discordia entre las lenguas en el mundo, que lleva a “la locura que ensordece la tierra”  (Escritos I el estadio del espejo) Aquí la interpretación del deseo inconciente  hace de corte y de sutura en el malentendido universal. La discordia de lenguajes nuevamente alude a Babel, al cristal de lengua y a lo Lacen conceptualiza como “Lalengua” donde lo simbólico es real. Decir la lengua es propiamente designar la lengua del sonido, del acento, la lengua supuesta, la de antes del significante amo. (ver: http://psicoanalisisyclinicacontemporanea.blogspot.com.ar/p/el-cristal-de-la-lengua.html )
(11) Las tinieblas del “mundus” allí donde se enrosca la discordia fundamental. PROVIENE DEL LATIN MUNDUS MUNDI Y SE REFIERE A TODO EL UNIVERSO.  UN HOMÓNIMO ES EL ADJETIVO MUNDUS QUE SIGNIFICA LIMPIO EN OPOSICIÓN A ÍNMUNDUS QUE DA LUGAR A INMUNDO. Lacan creo que lo pone en latín justamente para señalar todo el camino de confusión de las palabras de lo que significaba primero en griego luego el latín y en la actualidad, las tinieblas es lo inmundo
(12)La indicación tan alegórica a todas las religiones y a la mística en general, de un paraíso perdido: el bosque eterno, la naturaleza… perdida, como enseña el génesis por la serpiente podrida de la vida, es decir el lenguaje y el sexo.
“La serpiente era más astuta que todos los animales salvajes que el SEÑOR Dios había hecho, así que le preguntó a la mujer:
— ¿Es cierto que Dios les dijo que no coman de ningún árbol del jardín?
 Y la mujer le respondió:
—Podemos comer los frutos de los árboles del jardín. Pero Dios nos dijo “No deben comer frutos del árbol que está en medio del jardín, ni siquiera tocarlo porque si lo hacen morirán”.
Entonces la serpiente le dijo a la mujer:
—Con seguridad no morirán.  Incluso Dios sabe que cuando ustedes coman de ese árbol, comprenderán todo mejor; serán como Dios porque podrán diferenciar entre el bien y el mal.
 Cuando la mujer vio que el árbol era hermoso y los frutos que daba eran buenos para comer, y que además ese árbol era atractivo por la sabiduría que podía dar, tomó algunos frutos del árbol y se los comió. Su esposo se encontraba con ella, ella le dio, y él también comió. Como si se les abrieran los ojos, se dieron cuenta de que estaban desnudos” Génesis 3
La serpiente “habla” y revela el sexo, que a partir de allí en el mito lleva la marca de lo prohibido. La serpiente “habla” con Eva, quiere decir la intrusión del lenguaje en el cuerpo, goce fálico que parasita lo humano y con la letra entra la sexualidad humana: erotismo, vergüenza,  y pecado.

Ernesto Perez